Cuatro consejos a un joven universitario

1-Nacemos como proyectos inacabados. Si bien tu cuerpo ha terminado su desarrollo,  como persona nunca acabamos de madurar, de crecer. Hay un camino que ofrece el mayor desarrollo al Hombre, es el camino del servicio, de la ayuda, de “ceder el paso”. El Hombre crece cuando ayuda a crecer. Está diseñado para amar. SE AMANTE

2-Ahora que  miras hacia delante porque tienes toda la ilusión de escribir tu vida, no olvides que  tus padres  miran sobre todo hacia atrás, seguros de saber que  lo más importante por hacer  ya lo han realizado. Entre esas “cosas”  tú te encuentras. Tú madre y tú padre te han dado la vida, te han cuidado y te aman como nadie. Nunca serán suficientes tus besos. SE AGRADECIDO

3-Esfuérzate por prepararte,  pero no para “tener”, sino para “ser”. No caigas en la seducción del materialismo. Tu corazón nunca lo podrás llenar con cosas. Tienes un corazón insatisfecho. Fórmate disfrutando con el placer de aprender, mirando que esa formación sea la respuesta a  “una llamada” de tu interior: eso es la vocación. ESTUDIA PARA “SER”.

 4-Si tienes la suerte de amar a Dios, encuentra  tiempo para el silencio, para la oración. Cuida y cultiva tu relación con Dios. No hay caricia más tierna, no hay consejo que mejor colme tu inquieto corazón. SE CONTEMPLATIVO.

                                        Miguel Angel Martínez Dalmau

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