Este domingo aparece en las tres lecturas un mensaje insistente: el amor. El amor que nos tiene Dios. El amor que nos ha manifestado Cristo Jesús. El amor que hemos de tenernos los unos con los otros. Y además, un amor universal, sin fronteras
Tanto el evangelio como la primera carta de Juan nos hablan del amor que procede del Padre y a través de Jesús se manifiesta a los creyentes que han de responder a este don gratuito amándose mutuamente.
El libro de los Hechos de los apóstoles nos ayuda a profundizar aún más en ese misterio.